· Manifiesto ·
En marzo de 2011 el Consejo de Patrimonio Histórico del Estado aprobó el Plan Nacional del Patrimonio Industrial, coordinado por el Instituto de Patrimonio Cultural de España, con el objeto de corregir la precaria conservación de este tipo de bienes culturales en nuestro país, amenazado por la “escasa sensibilización hacia este patrimonio, tanto por parte de las Administraciones como de la sociedad”, y por los intereses derivados de su ubicación en “espacios urbanos de situación privilegiada”.
Ante el “gran número de elementos a conservar”, el Plan Nacional incorporó un Catálogo Mínimo en el que quedaron incluidos los bienes más significativos de la historia de la industrialización española, según una selección realizada por The International Commitee for the Conservation of the Industrial Heritage. Uno de estos elementos fundamentales seleccionados fue la Fundición Averly, en Zaragoza, un complejo industrial excepcional conservado en un grado sorprendentemente elevado de autenticidad y de integridad gracias al cuidado de la familia Averly-Bea-Hauke. Hay muy pocos conjuntos industriales urbanos tan extraordinariamente preservados como el de esta histórica fundición aragonesa.
Sin embargo, apenas dos años y medio después de que el conjunto de Averly fuera incluido en el Plan Nacional del Patrimonio Industrial y de que el propio plan detallara que los bienes incluidos en el Catálogo Mínimo debían ser declarados Bien de Interés Cultural en su conjunto, hoy la Fundición Averly se encuentra en la Lista Roja de Hispania Nostra, pues el 70% del conjunto va a ser próximamente demolido para permitir la construcción de más de 200 viviendas en distintos bloques de hasta 18 plantas. Es por todo ello por lo que los y las abajo firmantes hacemos un llamamiento a la opinión pública, a la Diputación General de Aragón, al Ayuntamiento de Zaragoza, al Gobierno de España y al Instituto del Patrimonio Cultural de España para evitar el derribo de Averly y conseguir la preservación de todo el conjunto en su unidad original, incluidos tanto los bienes muebles como los inmuebles.
Es por todo ello, y porque consideramos que el modelo de desarrollo urbano basado en la especulación inmobiliaria se ha demostrado obsoleto, porque apostamos por la sostenibilidad de los conjuntos urbanos, y porque defendemos la conservación del patrimonio como testimonio de nuestra sociedad, de nuestra historia y de nuestra cultura, LOS Y LAS ABAJO FIRMANTES APOYAMOS LA DECLARACIÓN DEL CONJUNTO ÍNTEGRO DE AVERLY COMO BIEN DE INTERÉS CULTURAL SOLICITADA POR LA ASOCIACIÓN DE ACCIÓN PÚBLICA PARA LA DEFENSA DEL PATRIMONIO ARAGONÉS, APUDEPA, y nos oponemos rotundamente a su amputación y demolición.
1 de enero de 2014